Neones Ocultos fue un fugaz grupo musical que dejó para la posteridad un par de discos con innegables muestras de talento.
La música en este libro nos ayuda a liberarnos, es el polen de una poesía nueva, sin maquillajes y resquicios innecesarios. El poeta abre las ventanas en este mundo de oscuridad inconcebible, que para nadie es grato, porque todo paisaje se torna inhabitable "La vía láctea se derrite como lágrimas", y en otro verso Andrés Garrido escribe con valentía y certeza "Opresivos tiempos mundanos". No obstante, su música nos transporta a horizontes en que el vuelo de la libertad es posible, a un viaje "Grácil como el sol fluvial". Neones ocultos es un canto necesario en estos días en que las sombras y el desencanto parecen seducirnos; sin embargo, esta música de acercamiento humano nos libera, se hace luz en la palabra.