Cuando Sara Foster se escapa de casa a los dieciséis años, deja atrás no solo las pérdidas que han destrozado su mundo, sino la chica que una vez fue, capaz de confiar e intimidad. Años más tarde, en Los Angeles, es una bartender codiciada, conocida tanto por sus brillantes cócteles como por el misterio que se aferra a ella. Al otro lado de la ciudad, Emilie Dubois está en un patrón de espera. En su séptimo año y quinto de especialización como estudiante, anhela la belleza y la comunidad que cultivaron sus abuelos criollos, pero es incapaz de comprometerse. Por un capricho, acepta un trabajo arreglando flores en el glamoroso restaurante Yerba Buena y se embarca en una aventura con el propietario. Cuando Sara ve a Emilie una mañana en Yerba Buena, su conexión es inmediata. Pero el daño que acarrean ambas mujeres y las decisiones que han tomado las separa una y otra vez. Cuando la vieja vida de Sara la alcanza, poniendo patas arriba todo lo que pensaba que quería justo cuando Emilie finalmente ha ganado su propio sentido de propósito, deben decidir si su amor es más poderoso que su pasado.